3 de noviembre de 2004

Esta vez se ha pasado ¡son las tres de la mañana! No, no pienso abrir la puerta, ¡me da igual que llueva! No va a encogerse, no? Encima no encuentro las putas velas, ¡mierda! Acabo de darme un golpe con la punta de la mesa, bueno, ahora ya sabe seguro que estoy en casa. Vamos, olvídalo, siempre te pones de su parte, se fue la luz, yo también me estoy congelando aquí dentro. ¡Te digo que no! Ni que lo estén degollando le abro la puerta. Olvidémoslo, hablemos de otra cosa, no soy cínica ¡ya sé que está enfermo joder! Si quieres le paso una nota por debajo de la puerta para que vaya a tu casa, si, si tanta pena te da, ya no soy su mujer, no me deja, ¿entiendes? No me deja, Él, su enfermedad, ¿Qué más da? No puedo soportarlo más, mañana llamo a la asistenta social para que recoja sus cosas, una oportunidad recuerdas, una más me pidió ¿Cuántas llevo desde entonces? Está gritando, ¡Dios mío! ¿Qué fue ese golpe? Tengo que colgar...


Teresa
www.gotitasporlavena.blogspot.com

No hay comentarios.: